Reconociendo el avance de la tecnología para superar importantes obstáculos en el sistema crediticio brasileño, proceso que ha sido progresivamente apalancado en los últimos años, es posible proyectar un año marcado por la consolidación de ciertas tendencias que aparecieron en 2023 y el calentamiento de nuevas posibilidades para las herramientas digitales. Esto, por supuesto, en un contexto de 'fintechzation', plasmado en soluciones desarrolladas para reformular las operaciones y las estructuras crediticias.
No es casualidad que otros fenómenos recientes hayan demostrado, con resultados reales y ejemplos prácticos, la importancia de pensar en un escenario crediticio más flexible. Es innegable que ha llegado el momento de identificar oportunidades que salgan del terreno común, con dinámicas que no solo impacten a la industria financiera, sino que también allanen un camino hacia una mayor autonomía y competitividad en el acceso al crédito.
En este contexto, algunos temas emergen como casi obligatorios para el análisis:
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Estructuras crediticias integradas (Préstamo integrado)
Para resolver los problemas crediticios y ofrecer una experiencia más satisfactoria al usuario, con más control y menos burocracia, este formato, especialmente en el sector minorista, se presenta como un verdadero activo para permitir la incorporación de ofertas de crédito, facilitando el acceso y ofreciendo, a los consumidores, opciones de financiación en el punto de venta.
El embedded lending cobra aún más fuerza cuando la empresa opta por utilizar capital propio para financiar las operaciones, por lo que toda la relación y conocimiento sobre el cliente puede utilizarse tanto en el análisis de riesgos como en los cobros.
Esta práctica desbloquea el crédito en operaciones en las que el banco, que está fuera de la operación, no puede hacer un buen juicio sobre el riesgo de incumplimiento.
Con este proceso simplificado y experiencia optimizada es plausible que podamos proyectar un amplio impacto en la cadena crediticia del país, en un efecto dominó que incluye un salto en el poder adquisitivo, impulsando las ventas y la lealtad de los clientes. Se trata de más confianza y facilidad a la hora de comprar, favoreciendo el acceso al crédito en un país cuya historia es de obstáculos para una parte importante de la población.
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Open finance para enriquecer el análisis del cliente
Open finance o finanzas abiertas es otro formato muy disruptivo y, como sugiere el término original, aboga por otorgar acceso a la información financiera del usuario, siguiendo estrictamente un compromiso de consentimiento de la persona física (PF) o persona jurídica (PJ).
Siendo la experiencia, una vez más, la palabra clave de la modalidad, todos los datos se comparten para gestionar la confianza y fortalecer la relación entre las partes, dando fe de puntos como la reputación y, principalmente, sirviendo como parámetro para nuevas oportunidades crediticias.
Desde el punto de vista de una empresa que busca conocer su base de clientes para otorgar crédito, las ventajas son numerosas. Open finance facilita la consulta y consolida información relevante, reduciendo riesgos, mejorando la precisión y promoviendo referencias seguras incluso para la fijación de precios de productos y servicios.
Open finance, contando con las mejoras aplicadas por el Banco Central en 2023, hará más justo el mercado de otorgamiento de créditos. Ahora, una empresa que quiera asumir el rol de financiar su ecosistema, por ejemplo un minorista que quiera crear su propio sistema de crédito, puede tener acceso a toda la vida financiera de su cliente, siempre y cuando este lo autorice.
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Infraestructura PIX para soportar concesión y cobranza
Cada vez más popular en Brasil, es cierto que PIX no necesita más presentación. El método de pago electrónico que ofrece el Banco Central (BC) tiene en esencia la practicidad de brindar pagos instantáneos en cualquier lugar y en cualquier momento, aportando eficiencia y agilidad al proceso. Sin embargo, tus reflejos no se detienen ahí.
Con disponibilidad prevista para octubre de 2024, PIX Automatic fue diseñado para sustituir la tarjeta de crédito, creando un sistema de pago recurrente sin que el usuario, como es habitual, tenga que realizar la transacción manualmente. Luego de un paso de autorización previa, los pagos se realizan de manera automática, sin requerir ningún tipo de autenticación. Para el usuario, esto supone ahorrar tiempo y evitar retrasos en los pagos, además de otras importantes ventajas, como la reducción de errores e inconsistencias.
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Uso de cuentas por cobrar registradas para liberar crédito
Desde junio de 2021, con iniciativa del Banco Central de Brasil, con el objetivo de reducir riesgos y promover una mayor transparencia, se implementaron registradores (entidades reguladas por el BC) para recibir de los acreditadores y subacreedores todo el flujo de cuentas por cobrar e información derivada, en la figura, incluyendo, de Unidades de Cuentas por Cobrar (UR), que son activos con datos de transacciones financieras aplicados a la tarjeta.
Maximizando el control del cronograma de cuentas por cobrar, el cambio abrió el abanico de posibilidades para negociar estos activos, brindando una visión integral para empresas y organizaciones comerciales. De esta manera, es posible diagnosticar mejores oportunidades y condiciones para la negociación de créditos de tarjetas, con aperturas para la contratación de operaciones de crédito garantizadas por activos registrados. En otras palabras, la empresa puede utilizar el activo como garantía para la liberación del crédito. Es otro escape positivo, que converge con esta agenda de innovación que ha revolucionado (y seguirá revolucionando) el mercado crediticio.
Este movimiento cobrará fuerza en 2024 con el avance de la implementación del Duplicado de Libros, que debería traer el mismo mecanismo ya operativo con las cuentas por cobrar de tarjetas de crédito, para duplicados. Esto significa que cualquier venta que tenga que recibir la empresa, si es expresada por el comprador, también puede utilizarse como garantía en operaciones de crédito.
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Consolidación de la Sociedad de Titulización de Crédito Financiero
Con las actualizaciones aplicadas a las normas para sociedades titulizadoras por parte de la CVM en 2022, esta estructura de captación y financiación de operaciones de crédito ganó mucho espacio en el último año. En 2023 tuvimos muchas operaciones nuevas, validando y consolidando el modelo para el mercado. Este año vemos un crecimiento aún mayor, principalmente de empresas que quieren "pilotar" una nueva operación crediticia con su propio capital, para luego captar fondos de terceros. La sociedad de titulización resuelve el mismo problema que el FIDC, pero es mucho más ligera en términos de estructura, obligaciones y costes.
Ciertamente, en 2024 surgirán otros nuevos acontecimientos que desafiarán el poder de adaptabilidad de quienes desean aprovechar un cambio generalizado en la infraestructura crediticia de nuestro país. La innovación promete y ha estado a la altura de la demanda de ofertas más competitivas en el sector y, al mismo tiempo, ha cumplido una función crítica para la democratización del acceso al crédito en Brasil.
*Ronaldo Oliveira es fundador y director ejecutivo de Giro.Tech.
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