Fecha de publicación: 09/10/2015
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El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció que su nación exportará hasta mil megavatios de energía eléctrica a Argentina, provenientes del excedente de generación nacional. La estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) será la encargada de firmar el convenio en las próximas semanas y hacer la venta.
Morales informó que Brasil manifestó su intención de comprarle 8 mil megavatios a la nación andina. Ende debe establecer los precios de la energía que se exportará. Ambas naciones concertaron en julio un acuerdo de construcción de una línea de transmisión que unirá, en principio, las localidades de Yacuiba (Bolivia) y Tartagal (al norte de Argentina). La segunda etapa de este acuerdo es ampliar esta línea hasta San Juancito, en la provincia argentina de Jujuy.
Entre los planes de Morales está convertir a Bolivia en una potencia energética con la generación de energía eléctrica derivada de centrales hidroeléctricas, termoeléctricas y eólicas, aprovechando, además, que Bolivia apenas consume 1.300 megavatios internamente, lo cual le da varios miles de megavatios en excedentes para la venta a países vecinos.
Para esto, la nación invertirá cerca de 30 mil millones de dólares en el desarrollo de al menos una docena de centrales energéticas en los próximos diez años con la meta de superar los 2.500 megavatios en excedentes.
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos y Energía boliviano, Luis Alberto Sánchez, informó que los tres países (Bolivia, Argentina y Brasil) definirán en el futuro inmediato proyectos comunes de exportación y construcción de infraestructura eléctrica. De hecho, el primero de los encuentros entre técnicos de estas naciones se realizará entre el 16 y 21 de octubre en Tarija, al sur de Bolivia.
Morales informó que Brasil manifestó su intención de comprarle 8 mil megavatios a la nación andina. Ende debe establecer los precios de la energía que se exportará. Ambas naciones concertaron en julio un acuerdo de construcción de una línea de transmisión que unirá, en principio, las localidades de Yacuiba (Bolivia) y Tartagal (al norte de Argentina). La segunda etapa de este acuerdo es ampliar esta línea hasta San Juancito, en la provincia argentina de Jujuy.
Entre los planes de Morales está convertir a Bolivia en una potencia energética con la generación de energía eléctrica derivada de centrales hidroeléctricas, termoeléctricas y eólicas, aprovechando, además, que Bolivia apenas consume 1.300 megavatios internamente, lo cual le da varios miles de megavatios en excedentes para la venta a países vecinos.
Para esto, la nación invertirá cerca de 30 mil millones de dólares en el desarrollo de al menos una docena de centrales energéticas en los próximos diez años con la meta de superar los 2.500 megavatios en excedentes.
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos y Energía boliviano, Luis Alberto Sánchez, informó que los tres países (Bolivia, Argentina y Brasil) definirán en el futuro inmediato proyectos comunes de exportación y construcción de infraestructura eléctrica. De hecho, el primero de los encuentros entre técnicos de estas naciones se realizará entre el 16 y 21 de octubre en Tarija, al sur de Bolivia.
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