Los desafíos legales que plantea la subasta 5G más grande del mundo

Las empresas deberán proporcionar la señal de internet 5G en todas las capitales para julio de 2022. / José Cruz, Agência Brasil.
Las empresas deberán proporcionar la señal de internet 5G en todas las capitales para julio de 2022. / José Cruz, Agência Brasil.
Hasta ahora, en Brasil el compromiso regulatorio era permitir que los operadores suscribieran acuerdos para usar su infraestructura de manera compartida.
Fecha de publicación: 09/11/2021

La subasta 5G de Brasil ha sido considerada la más grande del mundo en el sector. Son seis las empresas ganadoras que han tomado la operación de la nueva tecnología en el país, valorada en más de 8.487 millones de dólares. Estas operarán en cuatro bandas de frecuencia: 700 MHz, 2,3 GHz, 3,5 GHz y 26 GHz.

La joya de la corona fue la banda de 3,5 GHz, la principal de la subasta, que fue comprada por los operadores Claro (61,4 millones de dólares), TIM (63,7 millones de dólares) y Vivo (76,3 millones de dólares). El cuarto lote en subasta no recibió ninguna oferta. La frecuencia es una de las más utilizadas en todo el mundo y llevará la nueva tecnología directamente a consumidores, industrias y áreas urbanas.

Una vez finalizada la subasta y definidas las empresas operadoras, es el momento de implementar el sistema, algo que debería comenzar a finales de este año. De acuerdo con Arthur Barrionuevo, profesor de Economía de la Fundação Getúlio Vargas (FGV), "existe la obligación legal de que el 5G esté disponible en todas las capitales brasileñas en 2022. Pero eso no significa que tendrá, en este primer momento, una cobertura absoluta", analiza.

De acuerdo con Fernando Meira, managing partner de la firma brasiñela Pinheiro Neto Advogados, esta subasta ha sido una muestra de lo que se avecina en el país: "un plan de inversión muy grande".

"Tendremos muchas oportunidades de inversión con el Internet de las cosas. Las empresas querrán consolidarse, buscar financiación para todos estos proyectos, contratos de suministro, cuestiones fiscales que surgirán de nuevas operaciones en el complejo sector de las telecomunicaciones", detalla.

El cambio significa una enorme ganancia de productividad en la industria e incluso en el sector agroindustrial brasileño. Una de las posibles aplicaciones es en las granjas y tractores sin operación humana. Así, la inversión en tecnología puede resultar en una ganancia de productividad, según los técnicos del sector tecnológico.

Pero para que esta tecnología se convierta en una realidad en la vida cotidiana de los brasileños, es necesario ampliar la infraestructura, con la implementación de una red de estaciones base de radio, según especialistas. Para ellos, las inversiones en tecnología 5G deberían ser mucho mayores que las realizadas solo con la subasta, cuyo estimado de Anatel equivale a unos 9.086 millones de dólares, sumando las ofertas de todas las empresas ganadoras. Se espera que una parte de esta cantidad se utilice para conectar más regiones rurales del país.

A decir de Suzana Castelnau, socia de Donelli e Abreu Sodré Advogados, será importante destacar que la implementación de 5G comienza en las grandes ciudades y luego se expandirá hacia áreas más remotas, algo que puede llevar mucho tiempo.

"El objetivo es apalancar la economía y estimular el desarrollo, aunque a través de tecnología más antigua que ahora llegará a regiones más remotas, en concordancia con los compromisos asumidos por los operadores, según aviso público”, evalúa Castelnau.

Compromisos

Los tres operadores deberán migrar la señal de TV parabólica para liberar la banda de frecuencias, construir una red de comunicación privada para la administración federal e instalar cables de fibra óptica, vía río, en la región amazónica. Además, estas empresas deberán proporcionar la señal de internet 5G en todas las capitales para julio de 2022.

Los lotes regionales en el mismo rango permanecieron con las compañías Sercomtel (norte del estado de São Paulo), Brisanet (noreste y centro oeste), Consorcio 5G Sul (región sur), Cloud2U (Río de Janeiro, Minas Gerais y Espírito Santo) y Algar Telecom (localidades de Minas Gerais, Mato Grosso do Sul, Goiás y São Paulo).

La banda de 3,5 GHz se licitó a nivel regional y nacional para que las empresas puedan operar en las áreas más rentables junto con las menos rentables, lo que debería democratizar el 5G en el país, según especialistas.

Características de la subasta

Lo más destacado de la subasta es la inclusión de pequeños proveedores (PPP), que podrán participar en el desarrollo de esta nueva tecnología. Los PPP fueron priorizados en la etapa de ofertas para las bandas regionales de 3,5 GHz.

En la banda de 700 MHz, utilizada hoy en la frecuencia 4G, el ganador fue Winity II Telecom. El monto ofrecido fue de 254,4 millones de dólares. La empresa está vinculada con la inversora Fundo Patria. Con eso, el país contará con un nuevo operador telefónico que llevará la señal a 31 mil kilómetros de carreteras federales y ciudades sin cobertura 4G.

En la banda de 2,3 GHz, también para lotes regionales, Claro obtuvo las regiones norte, centro oeste y sur del estado de São Paulo. Brisanet ganó la operación en el noreste y Vivo se quedó con los estados de Minas Gerais, Río de Janeiro y Espírito Santo.

La frecuencia de 26 GHz, exclusivamente para 5G, tuvo a Claro como vencedora con dos lotes nacionales (9.600 millones de dólares cada uno), Vivo con tres (9.600 millones de dólares cada uno) y TIM con lotes regionales en el sur y en los estados del sureste, con excepción de algunos municipios. Algar Telecom (cinco lotes) y FlyLink (dos lotes) compraron operaciones regionales en el Triângulo Mineiro y ciudades de Mato Grosso, Goiás y São Paulo. Las concesiones son por 20 años.

Los lotes nacionales y regionales con exploración a 10 años tenían a TIM con un lote nacional (4 millones de dólares), uno en la región sur (726.942 dólares) y otro en el sudeste (2 millones de dólares). El estado de São Paulo también tendrá a Neko Serviços de Comunicações (Surf Telecom). 

La subasta se realizó en 9 rondas, divididas entre las cuatro frecuencias ofertadas, y en cinco bloques: noreste, sur, centro oeste y sudeste, con excepción de São Paulo y parte del interior del estado, transformado en un bloque separado.

Las concesiones podrán prorrogarse por el mismo período. Los compromisos asociados a todas las bandas fueron propuestos, según Anatel, con el objetivo de incrementar la infraestructura de banda ancha fija y el acceso a servicios móviles en áreas de menor interés comercial, según lo establecido en el Plan Estructural de Redes de Telecomunicaciones (PERT).

América Latina

Según los expertos, la principal necesidad que deben cumplir los países latinos en la migración 5G es invertir en infraestructura y aumentar la disponibilidad del espectro radioeléctrico. Hasta ahora, el compromiso regulatorio era permitir que los operadores suscribieran acuerdos para distribuir, implementar y usar su infraestructura de manera compartida, para reducir costos.

Además, expertos como la organización GSMA, asociación de operadores móviles y empresas digitales, detallan que sin garantías para proteger la inversión de las empresas, no buscarán traer sus productos a la región.

Aunque la legislación generalmente mantiene distancia de la tecnología, los países deben prepararse con marcos de derechos mínimos para los usuarios y disposiciones sobre transacciones electrónicas y uso de servicios; comercio transfronterizo; medio ambiente y residuos electrónicos y regulación de tarifas de interconexión y competencia, principalmente porque existe una concentración de empresas en la región.

También se necesitan normas procesales en materia penal para la denuncia de delitos, así como tipificar conductas y una reforma que sustituya a las normas promulgadas para sectores específicos de tecnología o servicios. A esto, agregar que se precisarán nuevas normas fiscales, de seguridad y protección nacional, privacidad y transferencia de datos personales.

La tecnología 5G es llamada el Internet de las cosas y permitirá velocidades hasta 250 veces más altas que la 4G, lo que significa cambios considerables en la forma en que funcionan los dispositivos. Puede estar en miles de equipos al mismo tiempo: smartphones, sensores de máquinas, cámaras de video, electrodomésticos e iluminación urbana inteligente, por ejemplo.

"Esta infraestructura requerirá una mayor aportación de capital, lo que hace que los operadores sean aún más cautelosos y eso sí puede impactar en los tiempos de instalación de la quinta generación de redes celulares", explicó el director de Telecom de Oliver Wyman, Vinicius Castelo.

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