Se acabó el primer mes del año y la expectativa para 2022 es enorme en el sector tecnológico: el principal factor que marcará la diferencia en Brasil es la promesa de instalar tecnología 5G en las principales capitales brasileñas, al menos. El plan, que se ha fijado para julio, pretende impulsar la transformación digital en prácticamente todos los sectores de la economía del país, incluido el mercado legal.
En perspectiva, la 5G permitirá velocidades hasta 250 veces más rápidas que la 4G, lo que significa cambios considerables en el funcionamiento de los dispositivos. La tecnología debería cambiar la manera en que se usa internet: descargas más rápidas, pruebas de autos monitoreados de forma remota, desarrollo de juegos de realidad virtual en la nube, control de plagas para la agroindustria, Internet de las cosas y una mayor producción de datos. Un cambio que multiplicará las ganancias en la industria legal.
El 5G abre la posibilidad, por ejemplo, de que los abogados ayuden a las empresas a adaptarse al cumplimiento digital y al cumplimiento específico de la Ley General de Protección de Datos, la LGPD. También hay todo un movimiento de construcción de instrumentos y contratos por parte de los abogados, para que las empresas regulen el uso específico de los datos capturados.
“Se espera que la tecnología 5G impacte el mercado legal de dos maneras: primero, las oficinas deben seguir invirtiendo en tecnología y automatización de procesos. Es decir, la tecnología debería impulsar aún más esta evolución, a medida que surgen innovaciones y se logre una mayor movilidad en el acceso rápido a Internet. Segundo, más importante, el mercado legal se enfrentará a nuevos problemas", detalla Ademir Antonio Pereira Junior, socio de Advocacia Del Chiaro, con maestría en Derecho, Ciencia y Tecnología de la Universidad de Stanford.
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El abogado añade que todo esto dará lugar a cuestiones jurídicas complejas, entre ellas la necesidad de regulación, cuestiones de responsabilidad civil, competencia y protección de datos. “Por lo tanto, los abogados deberán poder seguir este desarrollo y contribuir a las soluciones”, dice.
Especialistas en la materia explican que el cambio impactará la forma en que vivimos en sociedad, desde cómo interactuamos con la tecnología, hasta los hábitos y costumbres "analógicos" que aún tenemos, pasando por las telecomunicaciones, la movilidad, la salud, la educación, el entretenimiento, entre otros numerosos aspectos.
José Ricardo dos Santos Luz Júnior, abogado y director general de Lide China, evalúa que esto "conducirá a una mayor necesidad de flexibilidad, con el fin de exigir al profesional del derecho 4.0 que piense cada vez más 'fuera de la caja' para afrontar los retos más complejos y potenciales derivados de situaciones atípicas del saber jurídico y del derecho. El profesional deberá asumir una mayor postura como socio comercial, fundamental para la realización de los negocios, en detrimento del rol de asesor legal o consejero”.
Pero a pesar de la promesa de nuevas demandas, es bueno recordar, según los expertos, que el sistema legal nunca se adelanta a los cambios tecnológicos: generalmente se actualiza después de que surgen los problemas.
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Suzana Cencin Castelnau, socia de Donelli e Abreu Sodré Advogados (DSA), comenta que “probablemente tendremos una mayor demanda de judicialización que involucre videojuegos virtuales, más temas de privacidad de datos sensibles en viviendas monitoreadas, además de temas de nuevas tecnologías que surgirán y que aún no sabemos. Esto exigirá inicialmente una actitud diferente de los jueces que deben tratar el tema y, luego, del legislador que deberá regular los asuntos”.
La forma de implementar la tecnología 5G está regulada y la LGPD también establece parámetros para la protección de datos y derechos personales, pero el reto para el ordenamiento jurídico será regular todos los cambios que esto supondrá para la sociedad: será necesario, por ejemplo, evaluar cómo el Internet de las cosas afectará la privacidad de las personas.
“Brasil, con frecuencia, se inspira y adapta normas que otros países desarrollan para regular la materia, como es el caso de la Ley de Arbitraje, la Ley Anticorrupción e incluso el Código Civil. El desafío es que esa adaptación se haga de manera que se integre a nuestro ordenamiento jurídico, porque los cambios que vendrán son inevitables”, analiza Castelnau.
Para Wilson Sales Belchior, socio de RMS Advogados, la demanda regulatoria relacionada con los derechos de exploración de bandas de radiofrecuencia, velocidad, baja latencia y ampliación de la conectividad son, en conjunto, incentivos para las transacciones en medios electrónicos, lo que implica un aumento y diversificación de los conflictos que surgen de este espacio. “Otro aspecto se refiere al crecimiento de los problemas de privacidad y protección de datos vinculados a las innovaciones que utilizan la realidad aumentada y la realidad virtual, posibles gracias a 5G. Y en el sistema de justicia, ciertamente, el avance de la digitalización de los servicios judiciales”, analiza.
El potencial económico del 5G
Una encuesta de Ericsson estima un impacto inicial de 28.713 millones de dólares en ingresos resultantes de la digitalización directamente influenciada por la tecnología 5G. La consultora internacional IDC (Internet Data Corporation) estima que el valor generado a partir de tecnologías de alta conectividad, como el internet de las cosas (IoT), big data, robótica, inteligencia artificial y realidad aumentada, debe llegar a 25.710 mil millones de dólares en 2025.
En la agricultura, por ejemplo, se espera que 5G provoque una transformación masiva al permitir una transmisión de datos más grande, más ágil y de mayor alcance, explica Bernardo de Castro, presidente de la división de Agricultura de Hexagon, empresa que desarrolla y brinda soluciones digitales para el sector. “Con su potencial y menor costo operativo que 4G, 5G debería impulsar la conectividad en el campo, haciendo posible el despliegue de torres de transmisión en áreas más remotas. Esto debería reflejar un aumento en la adopción de tecnologías, capaces de aumentar considerablemente la eficiencia del campo”, indicó.
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Según el Ministerio de las Comunicaciones, la agroindustria debe ser el segmento más beneficiado por la tecnología, considerando que hoy alrededor del 23 % de las áreas rurales aún no tienen acceso a internet en Brasil.
En el sector eléctrico, la llegada del 5G permitirá una gestión energética guiada por el análisis de datos. “Por ejemplo, el soporte para dispositivos energéticamente eficientes alimentados por baterías o tecnologías de 'recolección de energía' (que convierten en electricidad pequeñas cantidades de energía del medio ambiente, previamente desperdiciadas), permitirá el uso de la red 5G para la instalación de sensores en una forma mucho más sencilla para los consumidores”, dice Danilo Barbosa, socio fundador de Way2, que se especializa en medir y administrar datos de energía para empresas, plantas y distribuidoras.
En el otro extremo, el soporte para mayores volúmenes de datos mediante planes asequibles puede habilitar aplicaciones como la discriminación de los datos de energía del consumidor.
En atención médica, 5G agilizará los diagnósticos y hará que los tratamientos sean más efectivos, además de permitir la difusión de dispositivos para monitorear los signos y síntomas de los pacientes y activar instantáneamente los servicios de atención médica. “5G garantizará aún más calidad y acceso a teleconsultas e incluso intervenciones quirúrgicas remotas. Este avance en la conexión mejorará toda la experiencia de servicio, permitiendo ofrecer un seguimiento más personalizado e integrado, con los pacientes como protagonistas de este proceso”, afirma Gean Pereira, responsable de innovación de healthtech Zitrus y del hub de innovación Zlabs.
En el sector financiero, la llegada del 5G permitirá experiencias financieras en el Metaverso. “Será posible mejorar la presentación de datos, indicadores y la oferta de productos, lo que ahora se puede hacer a través de entornos inmersivos en realidad aumentada y totalmente integrados, a través de la combinación de Metaverso y banca abierta”, analiza Bruno Imhof, CTO y cofundador de CashWay, una empresa de tecnología para fintech.
Además de estos cambios, 5G traerá negocios y potencial que solo se realizará dentro de un tiempo, cuando exista la infraestructura y cuando las personas se den cuenta de las utilidades que estarán disponibles. Todo esto puede generar toda una demanda de nuevos procesos.
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