Mercado legal, ¿mercado de abogados?

Los despachos tradicionales deben prepararse y entender que sus competidores ahora también son digitales / Unsplash, Mateus Campos Felipe
Los despachos tradicionales deben prepararse y entender que sus competidores ahora también son digitales / Unsplash, Mateus Campos Felipe
El ingreso de Amazon a la venta de servicios legales ha traído nuevos retos para los despachos tradicionales
Fecha de publicación: 19/07/2021

El ingreso de Amazon a la venta de servicios legales ha traído nuevos retos para los despachos tradicionales, los cuales deberán repensar la forma en cómo brindan sus servicios jurídicos.

Es claro que el de Amazon es un proyecto piloto; no obstante, los despachos tradicionales deben prepararse y entender que sus competidores ya no son únicamente otros despachos, sino que nuevas empresas del mundo de la tecnología han irrumpido en el ámbito jurídico para, a través de sus desarrollos, empezar a prestar servicios de una manera diferente.


Te puede interesar: La miopía del marketing y la innovación legal


El mercado legal ya no es un mercado exclusivo de los abogados. El número de competidores que ofertan servicios legales es cada vez mayor. Adicionalmente, los servicios legales ahora se prestan a través de diferentes estructuras.

La concepción de los despachos con figura piramidal es cada vez es más cuestionada, lo que ha sido aprovechado por muchas otras empresas de distintos sectores para marcar disrupción en el mercado legal.

En la actualidad, encontramos empresas dedicadas a proveer soluciones legaltech que buscan apoyar en la generación de procesos optimizados. Igualmente, encontramos a los Proveedores Alternativos de Servicios Legales (Alternative Legal Service Providers, ALSP por sus siglas en inglés), las cuales se enfocan en cubrir las necesidades de los clientes por proyecto y ofrecen el servicio de llevar a cabo aquellas tareas legales repetitivas, que son muy costosas para un despacho, por un precio más económico.

Una de las grandes diferencias de las ALSP en comparación con los despachos tradicionales es que su facturación no es por horas sino por proyecto, lo cual es cada vez más solicitado por los clientes. Este modelo de facturación está encontrando una buena acogida entre los despachos tradicionales, aunque es muy pronto para saber si este tipo de facturación remplazará definitivamente a la tan arraigada facturación por horas.  


Te recomendamos leer: El lado oscuro del negocio legal


Los despachos tradicionales entendieron que los clientes buscan eficiencia (menor tiempo, menor costo), razón por la cual han tomado nuevas rutas para seguir siendo competitivos.

Entre estos nuevos caminos podemos destacar la innovación dentro del despacho al adoptar tecnología en pro de un cliente que busca percibir una mayor eficacia en el uso de los recursos de la firma, y las nuevas alianzas estratégicas entre los despachos tradicionales y las startups legaltech, con el fin de contar de primera mano con la aplicación de nuevas tecnologías en la firma.

Un ejemplo claro de este tipo de alianzas es el que se refiere al desarrollo de herramientas de automatización para documentos legales. La concepción de que todos los documentos jurídicos deben ser tailor made (hechos a medida), es cada vez más refutada por la realidad. Pese a que cada negocio tiene sus propias particularidades, muchos documentos legales son reutilizados como punto de partida para la elaboración de uno nuevo.

El uso de herramientas de automatización de archivos permite generar mayor eficiencia y posibilidad de evitar errores humanos. Las herramientas tecnológicas permiten que los clientes sean los grandes beneficiados con estos nuevos procesos al apuntalar a los despachos tradicionales que transitan a través de nuevas condiciones de mercado, ante la realidad tan cambiante que nos ha tocado vivir.

El ingreso de nuevos competidores es benéfico para los clientes, pero tanto o mucho más es beneficioso para el sector, el cual ha sido muy reticente a tratar con nuevas tecnologías. Este escenario permitirá que los despachos y los abogados prueben y entiendan cómo la tecnología genera una mayor productividad en sus labores diarias.

Podrán comprobar que esta productividad les permitirá dedicar más tiempo a entender el negocio de sus clientes con el fin de conocer lo que en marketing se conoce como el pain point de cada uno de ellos. Esta es la forma en la que las firmas lograrán prestar mejores servicios.

La innovación no se limita a la adopción de tecnología. Los despachos iniciarán un proceso interno que les permitirá entender cuáles son las cadenas de valor dentro de sus modelos de negocio, y dentro de estas cadenas los procesos repetitivos que no generan valor y que pueden ser automatizados serán atendidos a través de mecanismos similares a los que están ofreciendo entidades como Amazon o las startups legales.

Esta adopción de innovación en las operaciones de las empresas jurídicas (Legal Ops) permitirá el surgimiento de la verdadera diferencia competitiva: la experiencia que vivirá el cliente gracias a la atención ofrecida por los abogados expertos de la firma. Vivimos en el mundo de las experiencias y quienes logren ofrecer soluciones jurídicas aderezadas con servicios diferenciados para cada uno de sus clientes lograrán no sólo mantener su lugar, sino escalarlo exponencialmente. 

Ya existen muchas opciones para "subirse" a este nuevo modelo —y vendrán aún más. Expongo tres ideas: la primera es comenzar a explorar lo que ofrecen las startups y, en caso de encontrar alineación en objetivos, trabajar en alianzas con ellas.


También puedes leer: La globalización y la tecnología como factores de cambio de la formación jurídica


La segunda opción es crear dentro del despacho un área de tecnologías de la información, encargada de analizar las legaltechs existentes, dividir los procesos del despacho e implementar herramientas que permitan la mejora de los servicios internos y externos.

Una tercera propuesta -que no por estar al final es la menos importante-, es contratar a un champion que se convierta en gestor del conocimiento y apoye en el cambio de la cultura organizacional pues está probado que ninguna adopción de innovación es exitosa si las personas dentro de la empresa no están abiertas al cambio.

Siempre existirán alternativas que permitan empezar a transitar por los nuevos modelos que impone la tecnología a los negocios, y de las cuales no podía quedarse segregado el derecho. 

Bienvenidos los nuevos competidores en el mercado legal que impulsen la innovación y hagan más eficiente el sector con el fin de enfocarse en lo que debía haber sido prioridad desde hace mucho tiempo: ofrecer mayor valor a los clientes.


*Juan Sebastián Ferreira Vargas es aliado activo de ALIL es Abogado Magister en Derecho Internacional de los Negocios por ESADE y estudiante de Maestría en Derecho Digital en la Universidad de Barcelona.


Recibe los mejores artículos de GestiónLexLatin al suscribirte al boletín mensual


 

Add new comment

HTML Restringido

  • Allowed HTML tags: <a href hreflang> <em> <strong> <cite> <blockquote cite> <code> <ul type> <ol start type> <li> <dl> <dt> <dd> <h2 id> <h3 id> <h4 id> <h5 id> <h6 id>
  • Lines and paragraphs break automatically.
  • Web page addresses and email addresses turn into links automatically.