Julio César Rivera (h) se ha unido a Marval, O'Farrell & Mairal como socio del área de litigios y arbitrajes, junto a su padre Julio César Rivera. Ambos lideraban la boutique Rivera & Asociados, misma que se unió a Marval este mes.
¿Por qué decidió hacerse abogado?
Cuando tenía seis años le dije a una vecina del club que la iba a demandar cuando me hizo un chiste que no me gustó. Supongo que, siendo hijo de jueces, siempre lo tuve incorporado y nunca realmente consideré otra alternativa.
¿Puede indicarnos una meta a mediano plazo?
Me gustaría tener una práctica fuerte en arbitraje internacional en América Latina en general y no solamente en Argentina.
¿Puede decirnos a quién admira como mentor (o un abogado que admire) y por qué?
Mi principal mentor fue mi padre, con quien trabajo desde que me gradué. Siempre he tenido una excelente relación con él y he aprendido muchísimo a su lado durante todos estos años. También admiro muchísimo a Héctor Mairal, por su trayectoria. Me parece increíble tener ahora la posibilidad de trabajar conjuntamente con él.
¿Puede indicarnos una película o libro que recomendaría a los estudiantes de Derecho?
En lo que respecta a películas de contenido jurídico, siempre me impactó Una acción civil. Creo que es una película muy buena para entender las consecuencias del sistema procesal civil estadounidense y los costos que implica el procedimiento de "discovery". En cuanto a libros, puedo recomendar los tres que siempre regalo a mis exestudiantes: Matar un ruiseñor (Harper Lee), Nunca me abandones (Kazuo Ishiguro) y Un mundo feliz (Aldous Huxley).
Si no fuese abogado, ¿cuál profesión hubiese escogido? ¿Por qué?
Siempre me interesaron mucho las ciencias políticas y la historia. Seguramente, habría encarado alguna carrera relacionada con esos temas.
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