La tecnología es una realidad cada vez más común entre las firmas de abogados, como un fenómeno capaz de reconfigurar sus rutinas y de los equipos involucrados en todas las etapas operativas. El hecho es que el uso de un software legal ha ofrecido un espacio de oportunidad para quienes buscan aprovechar los beneficios únicos de la era 4.0.
Sin embargo, para que la gestión se transforme en su totalidad, con metodologías absorbidas por los empleados, sin mayores trabas ni ruidos, no basta con introducir el elemento digital y esperar a que las cosas sucedan en corto tiempo, sin ningún tipo de esfuerzo. Es necesario prestar atención a los deberes de las y los profesionales ante un escenario de automatización. El concepto de transformación cultural sigue esta línea de razonamiento.
¿Cómo fortalecer el rol humano y reducir las posibles resistencias a la innovación? La máquina llegó para potenciar el protagonismo de las personas, no para opacarlas. En la práctica, se trata de un amplio esfuerzo de sensibilización, por lo que ambas partes parecen estar convergiendo.
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Invierta en una mentalidad innovadora
El acceso democrático a las herramientas digitales es un supuesto fundamental para el debate. A partir de ello, podemos diseñar el uso consciente de los insumos producidos por la tecnología, que apoyarán la toma de decisiones sobre los más diversos temas y propósitos. El flujo de operaciones, especialmente para las organizaciones legales, suele ser sumamente caótico, presentando un dinamismo que, de no ser eludido, detiene procesos esenciales para el negocio.
Dicho esto, la pregunta se dirige a cómo afrontar las adversidades de forma ágil y eficaz. La respuesta está en la simplificación que aporta la solución tecnológica.
El legaltech se aplica con el objetivo máximo de facilitarnos la vida. Asume, tras un completo y fundado diagnóstico, actividades susceptibles de ser automatizadas, que suelen reducirse a tareas repetitivas e incluso agotadoras desde la perspectiva del empleado.
La sinergia se sitúa en la medida en que el capital humano encuentra tiempo para centrar sus esfuerzos en procedimientos estratégicos. Con esto se construye una mentalidad colectiva de que el agente digital es un aliado y no un enemigo.
Por ello es de suma importancia nutrir la innovación en el ADN de la empresa. Esto también significa brindar tranquilidad a los equipos para que actúen con más inventiva, en un contexto de mayor seguridad, eficiencia y disrupción.
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La coexistencia da como resultado un nuevo nivel de productividad
Mientras en los sistemas manuales existe la urgencia de que el capital humano se dedique a numerosos detalles y cualquier acto defectuoso puede simbolizar la pérdida de un cliente, entre otras graves consecuencias, en el entorno digitalizado estas preocupaciones se eliminan de la agenda. Aquí aparece con claridad un nuevo modelo para la firma.
Por lo tanto, manteniendo la propuesta principal del artículo, reitero la necesidad de implementar la tecnología bajo un contexto cultural, dando siempre el debido carácter de prioridad a las personas, al fin y al cabo, ellas son las encargadas de realizar una rutina de alto desempeño, poniendo a la firma en un etapa consolidada de expansión. Ciertamente, la innovación puede y debe servir de apoyo para lograr mejores resultados, de forma continua y escalable.
*Rafael Laranjo es CTO de EasyJur.
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